En una sociedad repleta de constantes cambios, los trastornos alimentarios han emergido como una preocupante realidad para muchas personas. Desde desórdenes en la alimentación hasta enfermedades como la anorexia o la bulimia no solo afectan a la salud física, sino también en el bienestar emocional y mental de quienes lo padecen. 

Como Agente Caser mi labor va más allá de ofrecer pólizas; es también concienciar y educar en un estilo de vida saludable. La prevención de trastornos alimentarios es un tema que requiere atención y comprensión, no solo por parte de los profesionales de la salud, sino también de las familias, educadores y la sociedad en general.

¿Qué son los Trastornos de la Conducta Alimentaria? 

Los trastornos alimentarios, también conocidos como TCA (Trastornos de la Conducta Alimentaria), suponen un problema muy serio de salud, tanto física como mental. 

El National Institute of Mental Health define los trastornos alimentarios como ?enfermedades médicas graves con una influencia biológica que se caracterizan por alteraciones graves de las conductas alimentarias?.

Responden, por tanto, a comportamientos patológicos con respecto a la ingesta de alimentos y la obsesión por el peso, pero van mucho más allá. Es decir, no solo se trata de observar el aspecto físico de una persona, sino que hay que analizar otros factores de influencia. De hecho, se estima que la parte visible, como la actitud o los síntomas, representan un 10% con respecto al 90% restante, representado por la parte que no se ve, es decir, emociones, inseguridades, autoexigencia, etc. 

Por ello, el trabajo de prevención es fundamental, así como la labor de diagnóstico y seguimiento, ya que con un trabajo pautado por un profesional, las probabilidades de revertirlo con garantías son elevadas. Además, es importante que las personas que lo padecen sepan que no están solas en ese camino, puesto que existen múltiples maneras de recibir ayuda para tratar este tipo de patologías, sin olvidar que el papel de las familias y el entorno del afectado pueden ser diferenciales en el proceso de recuperación.

Veamos algunos datos interesantes...

Para que seas consciente de que hablar sobre los TCA es algo serio, te muestro algunos datos relevantes?

¿Sabías que existen alrededor de 400.000 casos de personas con TCA en España? Realmente son cifras a tener en cuenta, ya que se trata de patologías que, en muchas ocasiones, pasan desapercibidas hasta que el problema está muy avanzado.

Además, a pesar de que pueden afectar a todo tipo de personas, es cierto que existe un perfil que predomina por encima del resto, y son las mujeres entre los 12 y los 24 años. Aunque, según afirman desde la Asociación TCA de Aragón, cada vez se desarrollan a edades más tempranas (a partir de los 9 años) y están aumentando los casos en hombres.

¿Cuáles son los TCAs más frecuentes?

Si bien los trastornos alimentarios se caracterizan por originarse por causas muy variadas (factores biológicos, psicológicos, socioculturales?), existen varios tipos de TCA que son los más frecuentes, como: 
? Anorexia nerviosa, que implica la restricción excesiva de alimentos y comer muy poco, lo que hace que las personas que la padecen se encuentren por debajo de su peso normal óptimo.
? Bulimia nerviosa, en la que se suelen tener atracones de comida seguidos de comportamientos para compensar dichos excesos. No obstante, las personas que la padecen pueden tener un peso saludable.
? Trastorno por atracón, caracterizado por episodios recurrentes de ingestas grandes y descontroladas de alimentos. En diferencia con la anterior, en estos casos no se suele recurrir a conductas compensatorias.

¿Cómo identificar un posible trastorno alimentario?

Como he dicho antes, los trastornos alimentarios suponen un problema para nuestra salud física y mental. Por ello, es fundamental saber detectar o identificar posibles señales de alarma, con el objetivo de poder tratarlo a la mayor brevedad. 

Algunos de los signos que más se evidencian son:
? Trasfondo emocional no gestionado.
? Inseguridad, autoestima baja y autoexigencia elevada.
? Rechazo y mal concepto de la imagen personal.
? Cambios en la personalidad (mentir, irritarse, aislarse?).
? Evitar comidas o eventos con otras personas.
? Remordimiento y culpa por la comida.
? Dietas muy restrictivas, sin razón aparente.

Como decía antes, es importante reconocer síntomas previos y hacer un trabajo de prevención basado en una alimentación equilibrada, la práctica habitual de ejercicio y, en general, llevar un estilo de vida saludable. Según el National Institute of Mental Health, en aquellos casos en los que el TCA muestra su aparición, los planes de tratamiento que resultan efectivos para los pacientes, incluyen ?psicoterapia, atención y controles médicos, asesoramiento nutricional, medicamentos o una combinación de estos enfoques?. Por tanto, poner solución a este tipo de trastornos es posible, si sabes cómo hacerlo.

Caser Salud, un seguro a medida 

Sin duda, los trastornos alimentarios resultan un problema muy grave, tanto para las personas que los padecen, como para el entorno de la persona afectada. Por eso, es importante detectar este tipo de patrones y trabajar para solucionarlos.

En Caser nos gusta cuidar de las personas, y preocuparnos por su bienestar físico y emocional. Es por ello que hemos mejorado las coberturas, ampliando las sesiones de psicología para casos de trastorno de alimentación, añadiendo 20 sesiones adicionales por asegurado y anualidad del seguro.

Contacta conmigo para conocer en qué productos se encuentra incluida esta cobertura, y las condiciones en las que se aplica. Tu cuerpo es capaz de todo, ¡cuídalo y mantén una relación positiva con la comida y con él!

#TuAgenteCaser